Desde pequeña tenía claro que quería dedicarme a ayudar a los demás y conforme he ido formándome y adentrándome en la vida de mis pacientes, me he dado cuenta de que la salud mental es fundamental para poder alcanzar la vida que merecemos.

Estudié el grado en la Universidad de Zaragoza y me mudé a Madrid para comenzar el Máster General Sanitario en la Universidad Europea. A la vez, me formé en trauma junto a EMDR en SEMPYP, así como en otros campos como el autoestima, parejas o inteligencia emocional.

Me definiría como una persona cercana, empática, acogedora y tranquila. Disfruto plenamente de mi profesión, pues forma parte de mi y trato de trabajar desde la cercanía. Desde mi modelo de trabajo y como más cómoda me siento es creando un espacio seguro durante las sesiones, ya que creo que es muy necesario que mis pacientes se sientan recogidos y en un espacio libre de juicios donde puedan sentirse abiertos a expresarse como ellos prefieran. ¡Sin filtros!